La rusa tetona Bianca Burke quiere aprender a jugar béisbol, el buen pasatiempo estadounidense – MYLF Hay una diferencia”, dice.
"Quiero disfrazarme de chica, y si eso significa que tengo que chupar y follar pollas, estoy dispuesta", respondo, incapaz de mirarlo a los ojos. El profesor es un tipo corpulento y me intimida mucho. Abre la puerta y me dice que pase. Con las manos en mi cabeza, me puse manos a la obra. "Lo hiciste genial", con una sonrisa.
Me dice que me levante, toma su billetera y me da dinero. Estoy sentada esperando afuera de mi sala de profesores para mi revisión de dos años. Me preocupa decirle algo, pues presiento que no le gusto mucho. Me sorprende lo bien que me cabe en la boca; es un poco más grande de lo que puedo sostener, pero lo intento. Sus manos ahora están sobre mi cabeza. Me puse a trabajar. Estoy sentada esperando afuera de mi sala de profesores para mi revisión de dos años. Me preocupa decirle algo, pues presiento que no le gusto mucho. Lentamente, me sube y baja los labios. Se pone de pie y grita: "¡Desnúdate!".
Me levanto de un salto y me quito la ropa. Él camina a mi alrededor, me da una palmada en el trasero y me oye gemir. Se detiene para mirarme la polla, o mejor dicho, mi pito, ya que solo mide 5 cm. "Si me la chupas y me haces correrme". Se pone de pie y grita: "¡Desnúdate!".
Rápidamente salto y me quito la ropa, él camina a mi alrededor, me da una palmada en el trasero, me oye gemir, se detiene para mirar mi polla o mejor dicho, mi pene.