Sexmex – Muñeca Malena – ¡Ups! porno de papá enamorado Él era heterosexual después de todo.
Un diseñador de moda que supuestamente juega para el otro equipo se gana la confianza de sus clientas con curvas solo para verlas desnudas, y quizás seducirlas. Malena Doll visita su boutique para probarse vestidos exóticos, completamente ajena a las verdaderas intenciones del viejo lujurioso.
Me quedé sin aliento cuando me preguntó: "¿Te gustaría que te haga el amor, Morgana?"
Sabes que me gustaría que me hicieras el amor, Jilly. Llevar tu hermoso, hermoso, joven y desnudo cuerpo al clímax con mi lengua y mis dedos. Menos es más, quiero que parezcas una lesbiana de labios, no una lesbiana. Y sí que me sentí excitada y follable. Vivo para complacerte, lamerte hasta un clímax largo y lento. Suavemente, rastrillando mis uñas a lo largo de mi gran trasero. Lamer tus pezones, chupar tus hermosas tetas, lamer tu clítoris, lamer tu coño. Tengo treinta y tantos años, soy una atractiva profesional, sexualmente sofisticada y de género fluido, bisexual. La besaba cada vez que nos veíamos y nos despedíamos. Dime qué más me vas a hacer.
Quiero llevar tu hermoso, hermoso, joven y desnudo cuerpo al clímax con mi lengua y mis dedos. Me dice que me ponga de espaldas a la pared, con las piernas abiertas, desnuda excepto por los talones. Me excitó aún más cuando susurró: «Dime qué me vas a hacer, Morgana».
Sabes que eres un reto para mí, Jilly. En mi actual estado de éxtasis sexual, recuerdo cómo me han estimulado sexualmente con tantos métodos para alcanzar un orgasmo controlado. La había estado acariciando durante semanas, tiempo bien invertido. Gimiendo, tan mojada, perdiéndome en el momento, sin poder contenerme más. «Eres tan buena, Jilly». Susurrando: «Eres tan buena, Morgana, me encanta. Lame mi coño, fóllame el coño, fóllame el coño». Después de eso, mi vida sexual, nuestra vida sexual.
